Las empresas utilizan su conocimiento para generar información altamente útil para el desarrollo del negocio y el impulso de la innovación. El germen de este conocimiento está realmente en el dato, con un inmenso potencial aún por explorar y explotar.
Scientia potentia est. Esta sentencia atribuida al filósofo y pensador inglés Sir. Francis Bacon cobra el máximo sentido en el entorno empresarial en plena era digital.
Nadie pone en duda que las empresas, con independencia de su tamaño o del sector al que pertenezcan, utilizan su conocimiento para empoderarse, ampliar sus fuentes de ingresos, optimizar sus procesos internos y externos, y saber más de sus clientes de cara a ofrecerles productos o servicios que mejoren su experiencia de usuario y les fidelicen.
En esta coyuntura, manejar información fidedigna en el lugar y en el momento oportuno puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso de una organización.
Pero ¿dónde está realmente el germen del conocimiento? Los expertos apuntan cada vez con más fuerza al dato. Considerado el petróleo del siglo XXI, el dato tiene un inmenso potencial aún por explorar y explotar. Y es que adecuadamente analizado y combinado con otros tiene el poder de generar información altamente útil para el desarrollo del negocio y también para impulsar la innovación.
Sensores, teléfonos móviles, bases de datos, trazabilidad de cada búsqueda, transacción u operación en internet deja un reguero de datos que son verdadero oro para los departamentos de Marketing y Ventas de cualquier empresa y, por supuesto, también para la alta dirección, que a través de un adecuado análisis de datos puede estar seguro de tomar la decisión correcta, sobre la base de una información actualizada y coherente.
Los expertos aseguran que, en un mundo globalizado como el actual, solo aquellas empresas que sean capaces de extraer el máximo valor de los datos que atesoran en sus repositorios, sean estructurados o no estructurados, serán capaces de tomar decisiones informadas que les permitan ganar en eficiencia y ser más competitivos en el mercado.
El futuro pasa por el Big Data
En esta coyuntura, empieza a multiplicarse el número de organizaciones que adoptan técnicas de Big Data para gestionar y analizar sus datos de cara a obtener información fidedigna y real que les permita desarrollar su actividad, retener a sus clientes y ofrecer una mejor experiencia de usuario.
Fácilmente integrable en los sistemas de gestión de información de las compañías, la tecnología Big Data permite procesar y relacionar datos muy desordenados de manera ágil y sin grandes costes. Y lo mejor de todo, permite convertir simple información inconexa en conocimiento valioso para el empresario y todo su ecosistema.